jueves, 1 de abril de 2010

2/4 DIA MUNDIAL DE CONCIENTIZACION SOBRE EL AUTISMO


Es tiempo de escuchar

"Algo hermoso y grande sucederá la noche del 01 de abril… el mundo sabrá que existen personas diferentes y a la vez maravillosas y que se están perdiendo de conocerlas. La iniciativa toma el nombre Light it up Blue."
(Del Blog Mi Angel Sin Voz)

El 27 de noviembre de 2007, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución que declara el 2 de abril como “Día Mundial de Concientización sobre el Autismo”, con el objetivo de llamar la atención acerca de este trastorno del desarrollo, cuya incidencia ha aumentado en todo el mundo.

El documento plantea gran preocupación por la elevada incidencia del autismo en los niños de todo el mundo y recuerda que el diagnóstico temprano, al igual que la investigación y la intervención apropiadas “son vitales para el crecimiento y el desarrollo”.

La resolución subraya también que la Convención de los Derechos del Niño estipula el derecho de los menores discapacitados a disfrutar de una vida plena y digna.

El autismo afecta a seis de cada mil menores de 10 años y altera las capacidades de comunicación, relación e imaginación, sin que, por el momento, se conozcan sus causas exactas.

Desde que Leo Kanner definiera el autismo hasta hoy en que se ha ampliado la declaración de esta discapacidad como Trastorno del Espectro Autista (TEA) ó Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD) se ha recorrido un largo camino de esfuerzo compartido para que las personas afectadas estén dejando de ser “ciudadanos invisibles”.


Autism Speaks es una organización de los Estados Unidos que financia la investigación y aboga por los derechos y necesidades de las personas con Trastornos del Especto Autista. Su logo es muy significativo “El autismo habla, es hora de escuchar”.

Para dar inicio a las celebraciones por el Mes de Concientización sobre el Autismo, Autism Speaks, lanza su campaña “Light It Up Blue” en la noche del 1º de abril. La misma consiste en que los principales edificios de Estados Unidos, incluido el Empire State y de otras partes del mundo, estarán iluminados en color azul y se espera que la gente participe encendiendo una luz de ese color en su casa o negocio.

“Nuestro objetivo es iluminar el mundo de azul -ciudad por ciudad, pueblo a pueblo- para la adopción de medidas encaminadas a aumentar la concienciación sobre el autismo en nuestras comunidades.”

Otras cosas que puedes hacer para apoyar el Light It Up Blue:

* Usa un PIN con la figura de la pieza de un puzzle durante todo el mes de Abril, y habla a la gente sobre el significado del mismo.

* Cambia la imagen de tu perfil de Facebook por el logotipo de Light It Up Blue y convence a tus amigos de que hagan lo mismo.

* Pon un escrito en tu blog sobre este tema para aumentar la difusión

* Agrega el logotipo de Light It Up Blue en todos tus correos electrónicos y escribe tus correos ¡en azul!

* El 2 de abril lleva ropa de color azul y convence a tus compañeros de trabajo y amigos que vistan de azul también. Toma fotos y añádelas a la galería de Flickr.

Yo, también


Este año se estrenará en nuestro país la película española “Yo, también”. Es la historia de Daniel, un joven con síndrome de Down, primer europeo de esa condición en obtener un título universitario, que comienza su vida laboral en una oficina pública.

Allí conoce a Laura, una bella compañera de trabajo. Ambos inician una relación de amistad que pronto llama la atención de su entono familiar y laboral. Esta relación se convierte en un problema para Laura cuando Daniel se enamora de ella, pero esta mujer solitaria, que rechaza todas las normas de la sociedad encontrará en él la amistad y el amor que nunca recibió a lo largo de su vida.

Daniel quiere ser normal para amar y para ser amado. Pablo Pineda, quien
representa a Daniel en la película, dice que, si bien no es autobiográfica, en definitiva, el personaje no es demasiado ajeno a su propia existencia.

“Me di cuenta de que el tema de las chicas era muy difícil..., una dificultad añadida. Supe que el síndrome de Down iba a marcar mi vida, que las chicas no querían enamorarse de mí porque era síndrome de Down. Y todavía me sigo rebelando contra ese pensamiento.”

Aunque su capacidad intelectual está fuera de toda duda, su aspecto físico sigue condicionando su relación con el mundo. Por eso Pablo quiere conseguir que la sociedad trate a los afectados por el Síndrome de Down como personas normales y no como retrasados.

Después de obtener una diplomatura en Magisterio de Educación Especial en la universidad, Pablo Pineda está por terminar la licenciatura en psicopedagogía. Trabaja en un proyecto de la Unión Europea para fomentar el empleo con apoyo, y para lo cual hay que hacer una labor sensibilizadora muy importante. Está muy acostumbrado al contacto con los medios de comunicación, ya que ha sido entrevistado en innumerables medios y en la actualidad se dedica a dar conferencias sobre discapacidad. Escribió un prólogo en el libro “La vida con síndrome de Down”. Se expresa con un lenguaje culto, impecable.

Ha recibidos entre otros premios la Medalla de Oro de la Provincia de Málaga, la Medalla de Oro de Andalucía, el Jaume Pastor a la persona más destacada de la ciudad de Calpe y el Premio Andalucía Joven en Universidad de la Junta de Andalucía “por su perseverancia a la hora de superar su discapacidad”.

“Siempre he pensado en positivo y en que lo podía hacer; siempre he confiado en mí y en mis posibilidades. Me dijeron que podía hacerlo, y lo he hecho. No obstante, reconozco que ha habido algunos momentos en los que he desfallecido; pero creo que supe sobreponerme. Uno de los momentos más difíciles que he vivido fue en segundo de Bachillerato, cuando los niños del instituto no me hablaban, ni me miraban siquiera… En ese momento te planteas muchas cosas y sólo tienes ganas de tirar la toalla, pero para superar esa soledad me refugié en mi familia y en la gente que me quiere en general, para no dejarme arrastrar por la inercia y ponerme al mismo nivel que ellos.



Ser Down, como sucede con otras cosas, lo coloca a uno en una categoría que pesa mucho más que las potencialidades que se tengan, los talentos que pueda tener. "Es duro, más que nada porque siempre tienes que estar demostrando que puedes."

Querer es el primer paso para poder. Tener voluntad y perseverancia permite que las cosas ocurran.

"Pero cuando dicen que yo soy la excepción –sobre el Síndrome de Down- la sociedad ya está discriminando, porque presuponen que los demás no pueden. Pienso que yo sólo soy la voz de un colectivo que quiere, y está demostrando a la sociedad que puede."

Yo, también es un filme con el que Pablo y Lola confían que "la gente que lo vea se dé cuenta de que las personas con Down son algo más que unos genes y unos cromosomas, ya que tienen sentimientos y deseos". "Ojalá nos vean ahora con otros ojos", concluye Pablo.